Objetos inertes


Se trata de los objetos móviles e individualizados que pueden generar Ondas Nocivas u Ondas Benéficas. En estos casos es evidente que es fácil desprenderse de ellos (o conseguirlos) que conseguir un terreno o una casa sana.


Desde el punto de vista de la posible emisión de Ondas Nocivas, podemos dividir todos los objetos que nos rodean en tres categorías: benéficos, perjudiciales y neutros, y estas cualidades podrían ser de carácter extrínseco o intrínseco, y de origen accidental o esencial. Su nocividad o su influencia benéfica son relativas y pueden variar según los lugares, las épocas o las personas afectadas. Así que algunos objetos podrían ser nocivos para una persona y benéficos para otra.

Los objetos con influencia de carácter intrínseco, lo pueden ser por su naturaleza o por su forma; así, por ejemplo, una pirámide de cartón o una esfera pueden crear un campo de forma simplemente por su presencia.